JUEVES 15:
Coheed And Cambria
Tras romperse el hielo del festival, turno del carismático Claudio Sánchez y sus Coheed and Cambria en el Mainstage 01, el cual pisaron muchas leyendas durante el fin de semana. Había hambre de festival, y es que sin ser uno de los grupos más esperados del evento, contaron ya con una importante presencia de público a ritmo de “The Liars Club” o “A Favor House Atlantic”, con su mezcla de rock/metal progresivo en muchos momentos con guiños incluso al pop. Sin duda, destacaron una virtuosa e imprescindible “Welcome Home”, ese hit que les lanzó a lo más alto con un riff y melodía para la historia, para concluir con “Window of the Waking Mind” y cerrar un show correcto, sin grandes sorpresas
Imperial Triumphant
Con su buena puesta en escena, máscaras incluidas, los neoyorquinos tuvieron el honor de ser la segunda banda en tocar en el Temple Stage, y tal como se esperaba dieron un espectáculo muy llamativo con temas como “Transmission to Mercury”, en donde destacó la increíble mezcla de death metal y jazz. Cuando Steve Blanco empezó su sólo de bajo, sólo podía significar que estábamos en la antesala de“Chernobyl Blues”, con un sonido que te sumerge de lleno.
Harakiri For The Sky
Los austriaco es a día de hoy uno de los mayores representantes del post black metal que sigue en auge. A pesar de la ausencia de comunicación con el público, este estuvo bastante entregado, y ellos muy correctos, con un sonido muy técnico. La banda llega a crear un ambiente gris con su música, y buena prueba de ello se pudo ver durante temas como “I, Pallbearer” o “Calling the Rain”.
La decisión de cerrar su actuación con “Song to Say Goodbye”, cover de Placebo, fue sin duda alguna un muy buen acierto.
19:40- 20:30- IN FLAMES:
La banda sueca abría su repertorio con su “The Great Devicer” para avivar unos fuegos que ya habían estado presentes durante todo el día y es que las temperaturas de los primeros días causaron más de un estrago, también debido a la ingente cantidad de público presente.
Especialmente destacable fue la aparición en el setlist de Darker Times, primera vez que la banda saca el tema a relucir desde 2017 y sirvió de preludio para una oleada de temas de notable potencia que culminaron en “Take This LIfe” con la que dejaron paso a los vampiros hollywoodienses más polémicos.
20:35- 21.45- HOLLYWOOD VAMPIRES:
Rodeados por la polémica en la que se ha visto envuelto uno de sus guitarristas más celebérrimos, Johnny Depp y la ambigüedad en las respuestas del festival al respecto, los vampiros de Alice Cooper hicieron estallar las calderas con “I Want My Now”.
Las temperaturas seguían aumentando, pero no por ello la energía del público daba su brazo a torcer, al contrario, un público entregado celebraba la consecución de versiones que el supergrupo de estrellas hollywoodienses les arrojaba.
“Baba O’Rilley” de The Who, “Heroes” de Bowie o “Walk This Way” de Aerosmith no dieron un solo segundo para respirar y es que; pese a tener al bueno de Depp escayolado e irónicamente más parecido a un pirata pata palo que nunca, los californianos de adopción cumplieron con nota.
Candlemass
El inicio del concierto no pudo ser mejor, se notaba al público vibrar con “Mirror Mirror” y “Bewitched”. Algo que destaca de los suecos, es que a pesar de lo desesperada que pueda ser la letra de sus temas, la voz de Johan Längqvit es como un halo de luz en la oscuridad, acompañado por supuesto del sonido potente de guitarra y su batería constante.
21:50 - 22:50 - ARCHITECTS:
Tras un paseo de la fama cargado de clásicos con los Hollywood Vampires vamos por derroteros más oscuros con Architects. Temazos cañeros, rompecuellos, para apretar los dientes y botar hasta quedar sin aliento.
Como de costumbre un show intachable que arrancó con “Nihilist”, tanto en la ejecución como el los aspectos técnicos con un sonido impecable y unos juegos de luces que acompañaron a la perfeccion.
Especial mención merece también la dedicatoria especial de “Doomsday” a Parkway Drive y Tom Searle.
En definitiva, un show muy disfrutable que se encargó de recargar las pilas de todos los sudorosos presentes.
Dark Funeral
Cuando “Nosferatu” empieza a retumbar en el Temple Stage, significa que empieza el show de black metal, destacando el sonido de sus guitarras con un riff rápido y un ritmo amenazante que envolvía en la oscuridad. En general, los suecos crearon un buen fondo de sonido oscuro y maligno que permitía a las voces de los ecos de los gritos destacar, tal como se pudo apreciar en temas como “My Funeral” o “Let The Devil In”.
22.55 - 00:55- KISS:
Como colofón a la noche, las leyendas neoyorkinas por antonomasia hicieron su aparición a eso de las once de la noche. Rock and Roll de Led Zeppelin sonaba en los altavoces y eso es lo que se aproximaba, una fiesta rock and roll en toda regla.
Las estrellas de la noche hacían su aparición desde las aturas dejándose caer mediante cuatro gigantescas plataformas desde el cielo abierto de Clisson.“Detroit Rock City” abría un catálogo de himnos, seguido por “Shout it loud” y “Deuce” que demostraban que los años no pasan por el cuarteto y que, no sólo eso, si no que aún son capaces de conectar con el público y dejarlo todo encima del escenario.
Seguiría “War Machine” no sin antes añadirle un poco más de fuego a una tarde de altas temperaturas con un Gene tragando gasolina para escupirla después en forma de fuego dejándo claro que la fiesta no había hecho más que empezar.
A partir de ahi clásicos del rock y solos de guitarra se mezclan con fuegos artificiales y confeti que adornan la noche al rimo de temas como “Love It Loud” “Lick It Up” o “Calling Dr. Love” con una extensión en forma de Jam a cargo de Paul y Tommy. Con ello, y más lanzamiento de globos y fuego y demás efectos que iluminaban el acontecimiento llegamos a la fase final con “Love Gun” y “Black Diamond”.
“I Was Made For Lovin You” y “Rock All Night Long” servirían de piedra angular para terminar con una noche de fiesta en la que, si bien se puede decir que a nivel vocal no es la quintaesencia del rock, es indudable que como montaje, entrega y sacrificio sigue siendo un gustazo volver a ver a estos incansables tótems del Rock. Esperemos que por muchos más años.
Behemoth
Llegada la medianoche, era el momento perfecto de destacar para los polacos, uno de los mejores representantes del metal extremo del panorama actual. Un inicio potente con la voz desgarradora de ‘Nergal’ Darski a ritmo de “Ora Pro Nobis Lucifer” daba comienzo a la velada. La inclusión del tema “Once Upon a Pale Horse”, en su set fue todo un acierto, con un sonido fuerte de batería, y su guitarra
que tampoco se quedaba atrás, consiguieron un efecto positivo en la gente que se vino más arriba para la segunda mitad de concierto que quedaba.
Para cerrar lo que fue sin duda uno de los conciertos más esperados del Temple Stage la banda optó por “Chant For Eschaton 2000”, seguida de “O Father O Satan O Sun!”, perfectas para que los asistentes pudieran terminar de dar todo lo que tenían a gritos de ‘Hail Satan’.
Parkway Drive
Sin duda los de Byron Bay (Australia) eran de las bandas más esperadas de la jornada del jueves y posiblemente del festival, y no decepcionaron ni un ápice.
Las antorchas estaban en alto para dar paso a Winston McCall y compañía, quienes empezaron con fuerza a ritmo de “Glitch”. Venían con ganas, y eso es algo que el público que acude a Clisson siempre agradece dejando su voz como ofrenda, a pesar de las horas que eran.
Visualmente, ver a esta banda siempre es un espectáculo con todo lo que ofrecen, teniendo fuego por todas partes durante el show que acompañaban de manera excelente los ritmos impecables de la batería de Ben Gordon.
Con “Prey” encontramos un maravilloso sólo de guitarra de Jeff Ling resonando entre la multitud y crea un tono hermoso a la par que potente.
De la voz de Winston no se puede decir nada que no se haya dicho ya, es la voz y símbolo de Parkway Drive, no existe otra forma posible de describir. Momentos como “Idols and Anchors” demuestran la brutalidad que posee en sus cuerdas vocales, su energía te contagia y te mete más aún en el ambiente. Pero es que luego con temas como “Shadow Boxing” o “Darker Still” te demuestra que no sólo de guturales vive, que también puede destacar con tonos más suaves, y lo fácil que hace parecer el cambio de un estilo a otro.
“Bottom Feeder” apareció para ser ese contraste de lo que los australianos pueden ofrecer tras la ya citada balada. Tiene unas melodías de guitarra tan exclusivas de ellos, acelerando la actitud de un público que realmente estaba entregadisimo, y es que las llamas que acompañaban a la canción nos transportan a un momento en el tiempo plagado de riffs y ritmos explosivos, con voces agresivas. Es una de esas canciones que te animan a dejarte todo en el pogo.
Lo único negativo que se podría decir del concierto es que, como todo en la vida, tiene un final, pero si ese final es a ritmo de “Wild Eyes”, gritando junto al público, pues bienvenido sea.
VIERNES 16:
British Lion
Un día antes de tocar con Iron Maiden, los asistentes al festival tuvieron la suerte de poder disfrutar del otro proyecto del legendario Steve Harris.
Fue interesante ver cómo Harris puede tocar otros estilos diferentes a lo que nos tiene acostumbrados con su principal banda, con un sonido que tiende más al hard rock.
Su cantante, Richard Taylor, supo cómo interactuar con los asistentes tal como se pudo ver en temas como “This Is My God” o “Father Lucifer”, destacando en este último tema el alucinante sólo de guitarra. Por momentos al público quizás parecía costarle participar más en la dinámica del directo, es como si hubieran acudido al concierto por la curiosidad.
Elegant Weapons
Fue interesante ver este proyecto nuevo, creado en 2022, con los músicos Richie Faulkner, Dave Rimmer, Christopher Williams, y Ronnie Romero. Tantos nombres con su respectiva fama crearon un buen cocktail de rock potente que los asistentes al festival pudieron disfrutar los asistentes a la segunda jornada del Hellfest.
La mezcla de talento que se vió en temas como “Do Or Die” o “Horns For a Halo” fue un soplo de aire fresco para animar la tarde del viernes en el Main Stage y para desear que este proyecto siga por muchos años más.
16:40 - 17:25: SKID ROW:
Gran despliegue de energía a cargo de Erik Gronwall. El ex vencedor del Swedish Idol se echó al grupo y al público a las espaldas y salió airoso. Una sangre nueva que se agradece, un soplo de aire fresco lleno de potencia que tuvo al respetable bailando al ritmo que marcaba durante la hora entera de show.
Skid Row tiene un repertorio muy notable donde destacaron “18 and Life” y “Youth Gone Wild” pero además, con este artistazo se ha granjeado a un frontman de sobresaliente.
Sin lugar a dudas, uno de los puntos álgidos del festival.
Motionless In White
Entrada ya la tarde del viernes, era el turno para los de Pennsylvania. La banda, con su puesta escena, outfit y maquillaje ya conocidos, supo transmitir un buen rollo, destacando la actitud de su cantante Chris Cerulli, y eso es algo que el público, el cual estaba muy entregado, podía notarlo en temas como “Cyberhex” y “Voices”.
Muy buena asistencia para disfrutar del concierto en la tarde del viernes, y es que la popularidad que tiene la banda es algo notoria. Fue un show sencillo, pero bastante bueno.
El broche de oro para cerrar su actuación vino de la mano de “Eternally Yours”.
18:25 - 19:15: ALTER BRIDGE:
La combinación Myles Davis y Tremonti pocas veces falla y esta vez no fue una excepción. El concepto del formato festival con actuación de corta duración es entretener y ellos lo entendieron desde el minuto uno.
Fiesta de temas de ayer y hoy, perfectamente mezclados, no sólo no se ciñeron a los últimos temas del grupo sino que lanzaron una ráfaga de temazos culminando con “Blackbird” o “Isolation”.
De lo mejor del dia junto a sus predecesores.
Papa Roach
Poco tiene que hacer Jacoby Shaddix para tener al público comiendo de la mano, y es que la banda ya es veterana en ese derroche de adrenalina que soltaron en el Main Stage 2.
Los estadounidenses tienen una actitud de banda compuesta por veinteañeros, pero en el fondo ya peinan una que otra cana y se les nota cuando actúan como unos veteranos profesionales.
Quizás por ello la combinación de generaciones entre los asistentes que acudieron en masa para disfrutar de temas como “Kill The Noise”, donde rugían de forma muy activa.
El momento de “Firestarter”, cover de The Prodigy, fue simplemente espectacular, y es que la energía que desprende el tema encaja mucho con la actitud que Papa Roach suele tener en sus directos.
Pero, no sólo de temas cañeros vive la banda, y es que “Scars” demuestra que también saben hacer baladas además de ser una forma preciosa de recordar a los asistentes que el dolor es sólo temporal y como debemos disfrutar cada momento alegre.
Como colofón final no podía faltar su emblemática “Last Resort” en la que todo el público se entregó cantando al unísono.
20:25 - 21:55: DEF LEPPARD:
Machine gun kelly nos mandó a todos a dormir, pero si hubiésemos tenido un sueño lúcido diriamos que Def Leppard subió al escenario principal para ofrecer una actuación sobresaliente. La banda británica, demostró una vez más por qué siguen siendo una fuerza muy valiosa dentro de las leyendas del hard rock.
El setlist del concierto fue una verdadera delicia de 17 temas, para los incondicionales de los británicos. La banda recorrió décadas de éxitos, desde los himnos inmortales de los años 80 como "Pour Some Sugar On Me" y "Love Bites", hasta las canciones más recientes que han consolidado su estatus como leyendas vivas del rock.
De nuevo nos fue devuelta la confianza en las viejas leyendas del género cuya reputación había quedado un tanto tambaleante tras la actuación tibia de Motley crue y la aparición en forma de divo del pop de MGK. Un broche perfecto para el primer dia de fin de semana de este Hellfest 2023.
Venom Inc
Los veteranos del black metal siempre están listos para cambiar el ritmo del día con su tono oscuro y mantener su propia energía en el proceso. Fueron un ritmo duro, algo que se podía ver en temas como “Black Metal”, y eso permitió al público disfrutar bastante.
Podrán gustar más o menos, estos señores son los pioneros del metal extremo, y la agresividad y pasión que mostraban era una gran prueba de ella, destacando la intensidad de Tony Bray a la batería y como Tony Dolan quería dejarse las cuerdas vocales en el escenario.
23:15 - 00:45: MOTLEY CRUE:
Todo sueño plácido tiene su desvelo y en el caso de este Hellfest 2023 el bofetón para el respetable llegó con los de Tommy Lee. Otra aparición controvertida, por otro lugar. La fórmula fue la que debe ser, un recopilatorio de clásicos en el que se agradece el esfuerzo, la inclusión del acústico, e incluso la aparicion del insípido Machine Gun Kelly, pero más allá de los clásicos se quedó muy corto.
Himnos como “Kickstart My Heart” o “Dr Feelgood” no fueron lo suficientemente efectivos como para levantar a un público que contemplaba atónito cómo uno de los bolos más esperados de la presente edición se desmoronaba como un castillo de arena ante sus incrédulos ojos.
Al igual que Kiss lo dio absolutamente todo y se le perdonan las carencias allá donde las hubiera, en este caso el resultado, lamentablemente, no llegó al aprobado.
Sum 41
No es la primera vez que la banda toca en Hellfest, pero sí podría ser la última ya que los canadienses anunciaron el pasado mes de mayo su retiro para el próximo año tras más de 25 años de carrera. Tal vez por ello se entregaron más aún en la noche del viernes en Clisson.
Su inicio cañero con “Motivation” y “The Hell Song” fue un viaje a la nostalgia, son temas en los que los asistentes acompañaron a Deryck Whibley y compañía. Hablando del líder de la banda, su presencia era dominante en el escenario, ya fuera dominando la guitarra desde las notas iniciales, como con su voz.
Con “We’re All to Blame” pudieron demostrar que no sólo siguen sabiendo tocar ese estilo pop-punk por el que destacan, sino que también pueden combinarlo con el metal, con especial atención a los potentes riffs que se marcó Dave Baksh y la intensidad de Frank Zummo en la batería.
Ya se ha dicho antes, pero la banda se empeñaba en que les hiciéramos compañía en ese viaje al pasado, pero es que funciona, sólo así se explica que siendo más de la 1 de la noche, tras una jornada intensa de conciertos, el público aún tenga energía para unirse a cantar “In Too Deep” o dar palmas con el emblemático “We Will Rock You”, cover de Queen con su propio estilo skater.
Empiezan a sonar los primeros acordes de “Fat Lip”, el fin se acerca, el público lo sabe y consiguen ser ensordecedores. Para terminar la noche fue el turno de “Still Waiting”, otro himno clásico de los canadienses, dónde Deryck vuelve a hacer alarde de su habilidad para combinar tonos con su voz.
SABADO 17:
Bloodywood
Las personas que madrugaron el sábado tuvieron la suerte de empezar el día con ese ritmo característico de las películas creadas en Bollywood.
Las combinaciones de rap y guturales que tienen Raoul Kerr y Jayant Bhadula son simplemente maravillosas, con una fuerza destacable, destacando “Dana Dan” como uno de los mejores ejemplos donde se puede disfrutar esa mezcla.
Evergrey
Su “The Heartless Portrait” es sin duda uno de los mejores trabajos de 2022, y liderados por su único miembro original Tom Englund, Evergrey lo presentaban ante un tímido respetable en uno de los escenarios principales. Los suecos desgranaron piezas nuevas tan acertadas como la exigente vocalmente “Save Us”, los contrastes de “Midwinter Calls” o “Where August Mourn” o la efectiva y archiconocida “King of Errors” con sin duda el mejor de sus estribillos haciendo estragos entre un público para ese entonces más participativo. Gran presentación con una impresionante voz de Tom a pesar de no haber contado con un ‘feedback’ tan potente.
Asking Alexandria
No pasan de moda. Da igual los años que pasen, pero Asking Alexandria siguen funcionando en cualquier festival a día de hoy. Los británicos ya desde hace un tiempo con la vuelta de Danny Worsnop recuperaron esa formidable voz que necesitaban para el sonido actual de la banda. De hecho, volvieron a demostrar estar centrados en este sonido y lo hicieron con grandes cortes como “Alone Again” o la pegadiza “The Violence”, muy fácilmente coreable. “Into the Fire” sonaba contundente, mientras la nueva “Dark Void” se abría hueco para ser coreada a una sola voz junto a Danny. El final lo marcaban las melódicas “Where Did It Go?” y “Alone In A Room”, sin olvidarnos de una agresiva “The Final Episode (Let's Change the Channel)” que en esta ocasión llegaba muy pronto. Setlist muy acertado con un sonido que en este caso sopló a su favor.
Beast In Black
Un concierto realmente atractivo, no fue sorprendente que el público asistente estuviera cantando al unísono las canciones siguiendo a Yannis Papadopoulos y compañía, además de saltar y disfrutar.
Temas como “Sweet True Lies” y “One Night In Tokyo” fueron la causa de la entrega de la gente que se unió a la fiesta en Clisson.
Puscifer
En 2022 Hellfest contó con la presencia de Maynard James Keenan (Tool) y debió disfrutar, porque en 2023 ha repetido con su otro proyecto, aunque en diferente horario.
Con sus ropas de gala, como si fueran los Men In Black, se encargaron de amenizar la tarde con el viaje teatral que supone siempre su show, contando con temas como “Apocalyptical” o “Postulous”.
Un sonido muy limpio mezclando sonidos pot-industrial con rock experimental apto para los asistentes en la tarde calurosa del sábado.
Arch Enemy
Una apertura de concierto a ritmo de “Deceiver, Deceiver” ya pone sobre la mesa las claras intenciones que la banda va a tener durante su concierto, no dejaron ni hacer un calentamiento previo a los fieles del pogo.
Alissa White-Gluz ya nos tiene acostumbrados a cómo moverse por el escenario mientras nos impacta con su voz, o al interactuar con el gran número de asistentes que acudieron en masa la tarde del sábado al Main Stage 2. Y esta vez no fue diferente, como fue posible en canciones ya emblemáticas como “War Eternal” o “House of Mirrors”.
La pasión de su cantante fue contagiada al resto de los integrantes como se pudo sentir como Michael Amott daba paso a “Nemesis” con su guitarra y Daniel Erlandsson le acompañaba destrozando su batería con fuerza.
17:45 - 18:35: MYRATH (TEMPLE):
El conjunto tunecino demostró que aún tiene mucho que aportar a la escena.
Después de unos años de baja actividad y verse relegados de un espacio como el Mainstage, hicieron su aparicion en el Temple y quien sabe, quizá no todo fueran malas noticias.
En un espacio más íntimo desplegaron uno de los shows más entretenidos de este Hellfest. Una legión de seguidores tunecinos los alentaba y ellos no dudaron en sacar todas sus cartas. Malabaristas con fuego, bailarinas del vientre, trucos de magia, y sobre todo, mucha música con ese ambiente festivo que despliegan allá por donde pasan. Believer o Into The Night fueron buenos ejemplos de ello. Y tambien cabe destacar la incursión de Candles Cry, una rara avis en sus directos.
18:40 - 19:50: PORCUPINE TREE.
La banda británica, liderada por el visionario Steven Wilson, demostró una vez más por qué son considerados uno de los referentes del género, no sin antes dar muestra de su excentrícidad prohibiendo el uso de móviles durante el espectaculo. Si triunfaron en su petición o no, auguramos lo segundo.
Desde el momento en que las primeras notas resonaron en el aire con poderosos riffs de guitarra, arreglos intrincados y letras profundamente introspectivas, la banda transportó al público a un viaje sonoro que abarcó desde sus clásicos atemporales hasta su material más reciente.
Cada miembro de Porcupine Tree mostró una maestría indiscutible en sus respectivos instrumentos, mientras que Wilson cautivó con su voz inigualable y su presencia carismática en el escenario. A destacar serían su ya icónico “Blackest Eyes” y la anecdótica “Open Eyes”, con su primera interpretación en directo desde 2010.
En resumen, el concierto de Porcupine Tree en Hellfest 2023 fue una incursión curiosa que dejó opiniones divididas aunque no cabe duda del buen hacer de la banda dentro de su estilo.
Born of Osiris
Llevan varios siendo una de las bandas más populares en haciendo metalcore progresivo.
Ronnie Canizaro se encargó de poner la fuerza con su desgarradora voz, y no podría olvidar el potente sonido de Cameron Losch en la batería, con temas como “Bow Down” y “Angel or Alien” el público ya tenía buen material para disfrutar esta tarde del sábado.
19:35 - 20:35 : FINNTROLL(TEMPLE):
Finntroll conquistó al público del Hellfest 2023 con su actuación mágica y ferocidad. Su folk metal épico y enérgico, liderado por el vocalista Vreth, transportó a la audiencia a un mundo de criaturas mitológicas. Con himnos inconfundibles como "Trollhammaren" y "Under Bergets Rot", Finntroll desató una fiesta pagana sin igual. Con un setlist poderoso y una puesta en escena teatral, demostraron porqué son una de las bandas destacadas del género. Sin lugar a dudas uno de los momentos más destacables de los escenarios secundarios del festival.
20:40 - 21:40 : STRAY FROM THE PATH (WARZONE)
Stray From The Path hizo temblar la Warzone con su actuación explosiva y llena de energía. Con su mensaje de protesta y empoderamiento, conectaron profundamente con el público mientras desataban riffs aplastantes y ritmos frenéticos. El vocalista Drew Dijorio hizo gala de su carisma y temas como “Guillotine” y “First World Problem Child” fueron recibidas con fervor absoluto. Los de Long Island demostraron por qué son considerados una fuerza a tener en cuenta en la escena del hardcore.
Powerwolf
Con un set de una hora por delante, los lobos de Powerwolf salieron a escena con una impactante puesta en escena como siempre, con fuego, maquillaje y sobre todo mucha adrenalina. Melodías pegadizas, estribillos coreables y un Attila siendo un perfecto maestro de ceremonias para una de sus grandes noches en Francia, y es que Powerwolf contaba con una masa inmensa de público pendiente de su show, y es que la gente que esperaba a Iron Maiden (muy numerosa) copaba la plaza que une ambos escenarios principales.
Llamaban a la noche desde el Mainstage 02 a ritmo de nuevos cortes que hacían saltar al respetable como “Incense & Iron” o temas más asentados en su set como la agresiva “Amen & Attack” o la archiconocida y uno de sus últimos hits “Demons Are a Girl's Best Friend”. Ritual de metal eclesiástico efectivo, divertido y que tuvo su colofón con las ya clásicas “Sanctified With Dynamite” (con decenas de miles de palmas que acompañaban el ritmo), “We Drink Your Blood”, y “Werewolves of Armenia” y ese ya clásico juego entre Attila y Falk María con el ‘huh, hah!’. Los alemanes rugieron con más fuerza que nunca en Clisson.
Iron Maiden
Es sábado, empieza a sonar “Doctor Doctor” y todo fan de Iron Maiden sabe que esto es un aviso para que te vayas preparando para lo que se viene, para que estemos listos para gritar con Bruce Dickinson cada vez que él lo pida.
Cómo está siendo habitual en su gira actual, abrieron con “Caught Somewhere In Time” y como buen frontman que es, Bruce sale a lucirse, ganándose al público con muy poco, hay quién lo llama magia, y hay que lo llama recoger los frutos de la extensa carrera que tienen los ingleses a sus espaldas.
El show fue una mezcla muy acertada de ‘Somewhere In Time’ con su último lanzamiento ‘Senjutsu’, algo que nos permitía pasar fácilmente de temas como “Stranger in a Strange Land” a “The Writing on the Wall”, en la cual Dave Murray y Adrian Smith pudieron lucirse de forma imponente con sus guitarras.
Algo bastante destacable fue la inclusión de “Alexander the Great” en su setlist, es algo que no había ocurrido antes de esta gira. Se debe destacar a Dave Murray,
quien se lució con un tremendo sólo de guitarra que deja a todo el mundo boquiabiertos, los cuales únicamente pudieron reaccionar acompañando con los cuernos en alto.
Tras este momento que hemos vivido, y una ligera pausa, es el turno de “Fear of the Dark”, un clásico entre los clásicos, con un Bruce portando una gabardina con capucha que al bajarla consigue que la gente explote y se deje llevar en la ola de felicidad. No hay tiempo para descansos, es el turno de “Iron Maiden”, la forma que la banda tiene de recordarte que ellos aún están aquí, aunque los años pasen.
Los más avispados saben, que aunque parezca el final, hasta que la grabación de “Always Look on the Bright Side of Life”, de los Monty Python, suene, esto no ha terminado, y así es, la banda vuelve para mostrarnos esa combinación mencionada antes de su último trabajo con “Hell on Earth” y lo clásico como “The Trooper” y “Wasted Years”, siendo las dos últimas donde la gente se entregó más a los británicos.
Monster Magnet
Durísimo ‘clash’ el que se encontró Monster Magnet en el festival, y es que mientras cerraban prácticamente el Valley esa noche, en el escenario principal estaba actuando Iron Maiden. Pero poco pareció importarle a Dave Wyndorf y los suyos que salieron con hambre y un sonido potente en un Valley que no estaba precisamente vacío ni mucho menos.
Iniciaron con una poderosa “Born To Go” de Hawkwind o una maravillosa “Superjudge” que cuenta con esas deliciosas melodías de guitarra. El quinteto de Nueva Jersey siguió con una más densa “Dopes To Infinity”, sin olvidarse de clásicos como “Powertrip” o la definitiva “Space Lord” que armó un tremendo mosh pit junto a los saltos del respetable. Se desató así un fin de fiesta perfecto para un gran concierto de los norteamericanos
Voivod
La histórica banda canadiense comenzaba con “Killing Technology” para que el público pudiera calentar motores en el pogo.
Ritmos acelerados y cañeros en la batería y guitarra, junto a la voz de Denis Bélanger forman un combinado perfecto para que sientas las agujetas en tu cuello a la mañana siguiente. Pero cuando puedes disfrutar en directo temas como “Rise” o “Rebel Robot” sientes que cada cada moratón que encontrarás en tu cuerpo más adelante valió la pena.
23:05 - 00:30 : WITHIN TEMPTATION
Within Temptation desató una tormenta musical cautivando a la multitud con su elegante combinación de metal sinfónico y elementos atmosféricos. Liderados por la carismática vocalista Sharon den Adel, la banda holandesa desplegó un despliegue emocionalmente cargado de himnos poderosos y melodías cautivadoras que envolvieron a los asistentes de principio a fin.
Desde el momento en que las luces se atenuaron y los acordes iniciales de "Our Solemn Hour" resonaron en el aire, el público fue transportado a un mundo de magia y fantasía. El dominio vocal de Sharon den Adel fue impresionante, navegando sin esfuerzo entre susurros misteriosos y notas poderosas que llenaban el escenario. El sonido épico y orquestal de la banda, combinado con la energía de su interpretación en vivo, creó una experiencia inolvidable que dejó a los fans más que satisfechos, interpretando incluso, en primicia, “Bleed Out” por primera vez en vivo y que formará parte de su próximo álbum.
Algunos de los puntos destacables de la noche llegaron con la interpretación de "Supernova",”In The Middle Of The Night” y todo ello culminó con “Mother Earth”, todos ellos convertidos en emblemas del metal sinfónico.Como de costumbre los momentos de belleza melódica se entrelazaron con la fuerza del metal, creando una sinergia cautivadora demostrando una vez más, por qué son uno de los grupos más influyentes y emocionantes del género.
00:35 - 02:00 : CARPENTER BRUT
El maestro del synthwave transportó a la multitud a una dimensión retro-futurista, donde los ritmos sintetizados y las melodías envolventes crearon una atmósfera intoxicante. Con una presencia magnética, Carpenter Brut se convirtió en el comandante de un viaje sónico que desafió los límites de la imaginación y del propio festival.
Los éxitos como "Turbo Killer" y "Disco Zombi Italia"provocaron que la multitud se sumergiera en un frenesí de baile discotequero y festivo. Los visuales hipnóticos y las luces estroboscópicas resaltaron la estética retrofuturista dela cita, transportando a los espectadores a una realidad alternativa donde la nostalgia y la vanguardia se fusionaban. Con cada nota, el maestro del synthwave demostró por qué es uno de los exponentes más destacados de su género, llevando a todos los presentes en un viaje sonoro que terminó de estallar con la archiconocida “Maniac” de Michael Sembello haciendo estallar las glándulas sudoríparas de todos los presentes.
Meshuggah
Meshuggah es un gigante cuando se trata de hacer conciertos, a ritmo de “Broken Cog” empezaba su velada, con Tomas Haake marcando el ritmo progresivo a seguir con su batería.
Los riff de Frederik Thordendal y Mårten Hagström eran imponentes, perfectos para saciar las ganas de ese sonido tan característico que representa a la banda sueca.
Los gruñidos y muecas de Jens Kidman eran algo que también llamaban la atención, creo que ningún escupitajo llegó a caer sobre los asistentes que se encontraban en la primera fila del escenario Altar.
No había casi descanso entre canción y canción, era impresionante como la energía del público seguía existiendo, sobre todo en “The Hurt That Finds You First” y su particular circle pit.
Las luces estrambóticas y los láseres también tuvieron su presencia para poder terminar de construir la atmósfera que un concierto de Meshuggah tiene, tal y como se pudo ver en “Future Breed Machine”.
DOMINGO 18:
Hollywood Undead
Arrancaba el último día de festival y lo hacía con cinco personas que cantan, tocan y no paran sobre el escenario, y da igual que diluvie sobre Clisson. La hora de comer era hora de divertirse a lo grande con Hollywood Undead, y es que los norteamericanos con su metal alternativo son capaces tanto de sacar su rabia con “California Dreaming” (quizá con demasiado pregrabado), como de poner a saltar a medio Clisson con “Riot”. El pack que conforman “Comin' in Hot” y “War Child” es inquebrantable en sus sets, y es fácil encontrar por qué al ver la reacción del respetable. Vibrante actuación que no daba respiro con más hits como “Bullet” y los brazos del público ondeando de lado a lado, la efectiva “Hear Me Now”, la divertida “Everywhere I Go” con Charlie Scene como protagonista, para cerrar con la potencia de “Undead”. Qué difícil es hacer de la hora de la sobremesa y con esas condiciones climatológicas una auténtica fiesta americana, pero funcionó y de qué forma.
Halestorm
Y turno para uno de los torrentes vocales femeninos más importantes de los últimos tiempos, o lo que es lo mismo, Lzzy Hale. No llegaba sola ni mucho menos, y es que Halestorm se ha consolidado como una de las bandas más importantes del panorama desde incluso antes de aquel aclamado Grammy por “The Strange Case Of…”. Su set constó de canciones clásicas como la coreable y melódica “I Miss the Misery” con su grito desgarrador inicial de Lzzy o las agresivas “Love Bites (So Do I)” con su hermano Arejay hiperactivo tras los platos y “I Get Off” (su primer bombazo discográfico), alternando perfectamente con las más nuevas como el que es ya nuevo hit “Back From the Dead” o” la coral “The Steeple” que sirve como un cierre por todo lo alto. Mucho talento sobre el escenario que tuvo además de por
medio la celebración de Joe Hottinger cumpliendo 20 años en la banda justo en esta fecha, show especial en el que Halestorm curiosamente frenó la tormenta.
Cane Hill
En el húmedo escenario War Zone, se pudo ver un buen concierto de metalcore, con un sonido cañero, perfecto para soltar todas las tensiones acumuladas en el pogo.
Su cantante, Elijah Witt, interactuaba entre canción y canción con el público. Era una forma de ver los contrastes entre una persona cercana y luego su lado salvaje con temas como “Kill Me”.
Se podía respirar el buen ambiente que tenía la banda entre ellos en las interacciones que había entre canción y canción.
Para terminar fue el turno de “Too Far Gone”, perfecta para subir los decibelios y finalizar por todo lo alto.
16:50 - 17:40 : HOLY MOSES ( ALTAR):
La legendaria banda de thrash metal alemana encabezada por Sabine Classen, la vocalista icónica, desató su furia vocal y demostró por qué es considerada una de las figuras femeninas más influyentes en el mundo del metal.
El público fue arrastrado por la vorágine sonora de temas emblemáticos como "World Chaos" y "Finished with the Dogs".
En resumen, una exhibición arrolladora de thrash metal en su forma más pura, consolidando su legado y dejando un muy buen sabor de boca.
17:45 - 18:35 : AMON AMARTH:
El rugido vikingo de Amon Amarth se apoderó del Hellfest en una actuación que fue pura ferocidad desatada. Desde el momento en que salieron al escenario, la banda sueca dejó en claro que estaban dispuestos a arrasar con todo.
Con su característico sonido melódico y pesado, Amon Amarth transportó a la multitud a las batallas épicas de la mitología nórdica. Los riffs de guitarra demoledores, la implacable batería y los guturales vocales de Johan Hegg crearon un torbellino sonoro que hizo temblar los cimientos del festival. Tambien destacar la imaginería desplegada desde el fondo inundado de barcos surcando tormentas, hasta la recreación de un barco vikingo en el escenario a la aparición final de un monstruo marino hinchable, para no perder detalle.
Cabría destacar el ya mítico "Twilight of the Thunder God" pero en conjunto;el show fue una demostración de poderío vikingo y un tributo al metal extremo que dejó a todos los presentes con buen sabor de boca.
18: 40 - 19:40 : CRISIX:
Mira que se podrían elegir momentos épicos, legendarios e inconmensurables en un festival de la talla del Hellfest, pero amigos, lo de Crysix va directo a los libros de historia. La versión muy resumida dice que Incubus se cae del cartel a 20 minutos de comenzar su actuación por un problema de salud.
Los buenos de Crisix andaban por allí porque esa noche tocaban en la zona Cult ( la zona reservada para el club de supporter de Hellfest). Les avisan y les preguntan si quieren tocar en 15 minutos en el Mainstage para decenas de miles de personas y ellos, no contentos con aceptar el guante se marcan la hazaña de dar un conciertazo salvaje con todo el mundo botando y haciendo pogos como locos.
El cuento de la cenicienta en forma de thrash Metal, culminado con un homenaje a la película de la máscara convertido en la mejor analogía de lo que acababa de ocurrir.
Tenacious D
Era el momento de recibir a la ‘D’. La púa del destino aterrizaba en Hellfest comandada por Kyle Gass y por la estrella de cine y de la música Jack Black, que se las gasta a las mil maravillas a la guitarra y voz junto a su inseparable compañero. Escenario muy austero, con la banda y los
dos protagonistas sin moverse mucho de la parte central de las tablas, hasta que apareció su ‘nuevo técnico de pirotecnia’, dando ese punto de humor tan habitual a sus shows. El show comenzaba con los primeros acordes de “Kickapoo” (como arranca también la película que hizo famosa a esta agrupación) desatando el griterío de un público que abarrotaba como pocas veces hemos visto el Mainstage 01. La intensidad no decayó con los contrastes de “Rize of the Fenix”, aunque “Wonderboy” supuso un pequeño parón en este inicio glorioso.
Poco tardó en remontar la actuación con la archiconocida “Tribute” y el riff poderoso de “The Metal”, con un robot de metal gigante apareciendo sobre las tablas para bailar con Kyle y Jack. Llegó el momento “Sax-a-Boom” con Black y su mini-saxofón de juguete, que encontraba respuesta con Kyle y un saxofón idéntico de juguete (en este caso gigante), “interpretando” la gloriosa melodía de “Baker Street” de Gerry Rafferty. “Roadie” a pesar de no ser tan conocida y estar dedicada a sus ‘roadies’, funcionaba a la perfección en este set. Se acercaba el final con Kyle “dejando” la banda para interpretar solo Jack una bella “Dude (I Totally Miss You)”,
recuperándole a mitad de canción para interpretar después una nueva y especial versión del “Wicked Game” de Chris Isaak.
El ‘rush’ final lo marcaba la canción final de la película “Beelzeboss (The Final Showdown)” coreada a una sola voz derrotando (o deshinchando como dijo Kyle) a la bestia que surgía tras el escenario. “Master Exploder” y la sexual “Fuck Her Gently” de nuevo aclamada a una voz finalizaban con el ritual demoníaco y con el nuevo técnico de pirotecnia ahora sí haciendo bien su labor.
Lord Of The Lost
Tras Eurovisión, era el momento de que los que asistieron al Temple en Hellfest también pudieran disfrutar de los alemanes.
A ritmo de “The Curtain Falls” empezaba el recital en esta tarde de domingo, y la voz de Chris Harms atrapaba al público con su presencia, teniendo un tono limpio que en ocasiones acompañaba con unos tonos más graves e imponentes.
La mezcla del metal industrial y rock gótico fueron una constante que activó a su público a ritmo de temas como “Full Metal Whore” o “Blood & Glitter”.
21:00- 22:25 : PANTERA:
El icónico grupo de metal hizo temblar los cimientos del escenario principal con una actuación inolvidable que recordó a todos por qué son una leyenda viva del género. Desde el primer acorde de "A New Level", la banda texana demostró su maestría y presencia escénica, conquistando a la multitud con su furia inquebrantable, ya que además de todo lo dicho, era la primera vez en muchos años en los que los podíamos volver a ver reunidos.
El vocalista Phil Anselmo, que está en un estado de forma sensacional, se mostró como un verdadero titán del metal, entregando su voz feroz y desgarradora en cada palabra pronunciada.Pantera desató una tormenta que, tras el chaparrón literal de la mañana, esta vez caló a los asistentes hasta lo más profundo de su ser. Temas como "5 Minutes Alone" y "Yesterday Dont Mean Shit" hicieron las delicias de un público completamente entregado al hardcore felino de los de Texas.
La tormenta sonora descargó toda su energía con “Walk” un clásico inmortal al que todos los fans esperaban deseosos y que cumplió sobradamente las expectativas desatando pogos y gritos de aliento a partes iguales y plantándole una alfombra roja a “Cowboys From Hell” himno sin discusión de la banda, que a estas alturas ya nos tenía a todos en el bolsillo y solo necesitaba ponerle la guinda al pastel.
Pantera demostró que sigue siendo una fuerza indomable que sigue impactando a la escena del metal. Con su poderío sonoro y su entrega apasionada, la banda reafirmó su lugar en la cúspide del género confirmando que los de Anselmo siguen siendo un referente indiscutible en el mundo del heavy.
Dark Angel
A ritmo de “We Have Arrived” los californianos comenzaron la conquista con su música del escenario Altar. La banda sonaba con tanta potencia que daban ganas de menear el cuello y dañarse el cuerpo en más de un pogo.
La voz de Ron Rinehart no parece haber envejecido del todo y como Gene Hoglan aporreaba su batería era un placer para el oído. No pudieron faltar himnos del thrash metal como “Darkness Descends” o “Merciless Death”.
Paradise Lost
Los británicos son toda una institución en los sectores góticos del rock y metal, y así lo demostraron ante los que asistieron al escenario Altar este domingo, pese a que no estaba hasta reventar, las sensaciones que el público sí que lo hacía parecer.
Un sonido muy limpio en temas como “Gothic” o “Ghosts” fueron suficiente para ver que Nick Holmes y los suyos siguen en forma después de tantos años de carrera a sus espaldas.
Testament
El Altar Stage estaba preparado para cerrar sus actuaciones por este año, y qué mejor forma que con un matillo pilón como es Testament. El rodillo de thrash metal americano puso la máquina a engrasar a eso de las once de la noche con “Rise Up” y la voz de Chuck Billy en su punto. Desde aquí un sinfín de hits como “The Preacher” que tardaba poco en llegar, el efectivo estribillo de “Practice What You Preach” que no daba respiro en una pista en la que los circle pits se sucedían sin pausa. “D.N.R. (Do Not Resuscitate)” siempre se antoja necesaria en su set, y se acercaba una parte final demoledora marcada por éxito tras éxito, empezando con una gloriosa “Over the Wall” con la dupla Alex Skolnick y Eric Peterson repartiéndose solos y uniéndose en esa famosa melodía que aclamaba el público galo. Más madera llegaba con “Into the Pit” y una pista exhausta que gastaba su último aliento en ella. Testament fue el perfecto broche de oro a otra edición más del festival francés por antonomasia a pesar de su coincidencia en horario con un gigante como Slipknot.
22:30 - 00.00 : SLIPKNOT:
El Hellfest 2023 llegó a su clímax con la actuación apocalíptica y frenética de Slipknot. Con su inconfundible imagen de máscaras y overoles, la banda estadounidense desató una tormenta de caos y violencia en el Mainstage 1. Desde el primer acorde, el público fue arrastrado a un torbellino de riffs atronadores y ritmos demoledores. La intensidad y la energía emanaban de todos y cada miembro de la banda, mientras Corey Taylor dirigía a los presentes con una voz en estado de gracia acompañada por un despliegue de elementos que llenaba el escenario y hacía parecer que los miembros del grupo fuesen incontables, pese a por causas personales, sufrir la baja de Clown (Shawn Crahan).
El escenario se convirtió en un campo de batalla sonoro, con luces y demás efectos que añadían un elemento visual impactante. La banda de Des Moines no solo entregó su característico sonido agresivo, sino que también cautivó con una puesta en escena teatral y salvaje.Los golpes de los tambores resonaban como latidos de guerra, mientras se sumergían en el caos con temas como “Liberate” o “Psychosocial”.
La bestia había sido liberada y ya no había marcha atrás, el público estaba entregado y la cita invitaba a seguir con la fiesta, “Eyeless”, “Unsainted” o “Purity” seguian haciendo las delicias de los presentes y el apoteosis final llegó con una ráfaga de violencia desatada con “Duality” y “Spit it Out”
En definitiva,el cierre de este Hellfest 2023 fue una muestra por parte de Slipknot de su legado como titanes del metal y una prueba de que su influencia y poderío escénico se mantienen inquebrantables a lo largo del tiempo. Y sirvió a su vez, para ponernos los dientes largos para el próximo en 2024. Larga vida a Hellfest.
Crónica: Izabela Rozborska / Antoine Gomila
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